Es allí que se comprueba que se trataba de ciudadanos de nacionalidad boliviana que habían ingresado por un paso no habilitado a Chile y lo hacían portando drogas que pretendían comercializar en nuestro país.
Los militares siguiendo los protocolos pertinentes, pusieron a los individuos a disposición de personal de la 2a Comisaría de San Pedro de Atacama, quienes a su vez entregaron los antecedentes al Ministerio Público.
El hecho constituye la primera aplicación de las nuevas instrucciones para fuerzas militares de colaborar en el combate al narcotráfico en zonas fronterizas del país.
